sábado, abril 19, 2008

LAS COSAS Y SUS NOMBRES : HIDROLÓGICO

LAS COSAS Y SUS NOMBRES

El REFRÁN

AGUA QUE NO HAS DE BEBER, DÉJALA CORRER
De repente todos están sedientos. ¿De agua? Parece que no precisamente. El agua no es el fin, sino el medio. Se trata ni más ni menos que de distíntas políticas del agua.

“LOS RÍOS QUE VAN A DAR EN LA MAR, QU’ES EL MORIR...”

Para los que inventaron el pensar, hace de eso decenas de miles de años, los ríos eran dioses. El primer paso hacia su racionalización, igual que la de los vientos, la de las nubes, la de las tormentas y los relámpagos, la de las estrellas, fue su divinización. Si no hubiese sido toda la naturaleza objeto de culto, nunca hubiera llegado a ser conocida primero, y luego dominada y cultivada. Es que cuando del culto hay que pasar al cultivo, no queda más remedio que acabar dando muerte al dios. Las vacas sagradas de la India son el paradigma del culto estancado que no evoluciona hasta el cultivo: los adoradores de las vacas sagradas, en vez de alimentarse con su leche y con los becerros que salen de su vientre, se untan la cara y el cuerpo con sus sagradas boñigas. En eso queda el culto que no trasciende a cultivo. Es que condición de todo culto evolucionado es acabar dando muerte al animal sagrado y comulgarse sus despojos. No es propio de una cultura desarrollada dejarle morir de muerte natural; porque esa es una muerte estéril de la que no obtienen provecho alguno sus adoradores. Y su culto es también estéril.

Tener ahí la vaca sagrada y morirse de hambre y encima dejarla que arrase cultivos; vivir junto al río sagrado y morir de sed, contemplando cómo sus sagradas aguas van mansas hacia la mar, que es el morir; empeñarse en que la vaca y el río han de morir de muerte natural, sin dar el salto del culto al cultivo, suena demasiado ancestral en un mundo que ya es incapaz de funcionar si no sigue sacrificando todo lo sagrado. El que sangra a un río no lo hace por el bien del río, sino por su propio provecho. Y nunca lo sangra en la medida en que le conviene al río, sino en la medida en que le conviene a él. Así los ríos, así los mares, así los bosques, así los bancos de pesca, así los yacimientos minerales, así los petrolíferos, así los de aguas subterráneas, así todo.

¡Para qué nos vamos a engañar! Ningún cultivo (¡ni siquiera ningún culto!) se inventó para bien del cultivado, sino del cultivador. El problema no está en si explotar mucho o poco las aguas de los ríos, sino en quién las explota. Si lo hace quien se cree legitimado para ello, quien tiene la potestad sobre las aguas, nada importa que lo mate, como no importa que los fieles maten y devoren a su dios; lo que importa no es que sea dios, sino que sea suyo. Los argumentos en defensa del río sólo valen para el caso de que sea un explotador ilegítimo quien pretende llevarse sus aguas. Es en este caso cuando hay que dejarlo morir de muerte natural, vertiendo sus aguas a la mar.

No nos engañemos: toda agua que se le saca al río altera su vida. La propia existencia de la agricultura, de la industria, de las ciudades, del turismo, es ya de por sí un atentado contra la vida de los ríos, porque para mantener toda esa actividad (no importa si está a la misma orilla del río o si está a cientos o miles de kilómetros), la vida que se da a todas esas actividades, hay que quitársela a los ríos. Y resulta que los campos, las industrias, las ciudades y el turismo existen. Y crecen. Y es inexorable que en la medida en que éstos crecen, decrezcan los ríos. Si de lo que se trata es de defender el río, ¿acaso extrayendo sus aguas para regar las tierras adyacentes, el río no se resiente? Si la industria o el turismo se instalan al lado mismo del río, ¿gastarán por ello menos agua? ¿Qué se defiende pues, el río o el derecho a explotarlo? Y si para el dinero se defiende la bolsa común, ¿cómo se puede defender que el agua no sea común? Lo más paradójico es que Aragón reclame que se le trasvasen caudales importantísimos del dinero de toda España, para que les permitan aprovechar ellos solos el caudal del Ebro. ¿Así que a Aragón no le sobra ni una gota de agua para el resto de España, y al resto de España le han de sobrar ríos de dinero para que Aragón pueda aprovechar el Ebro exclusivamente para su región? ¿Y eso cómo se come? Tan relativos son los déficits y los excedentes de dinero, como los excedentes y los déficits de agua.

EL ALMANAQUE se detiene hoy en el término hidrológico.

HIDROLÓGICO
La hidrología, a imagen y semejanza de otras muchas palabras que acaban en –logía, nació con vocación terapéutica. Se inventó esta palabra para designar con ella la ciencia de las propiedades curativas del agua. Así el hidrólogo era el médico que empleaba “las aguas”, que no el agua, como principal recurso para aliviar a sus pacientes. Hidrológico era todo aquello que tenía que ver con estas artes de la salud. Y un plan hidrológico era el itinerario que debía hacer el paciente por los distintos balnearios para “tomar las aguas”. Se aplicó también este término a otras actividades que tenían que ver con las aguas, pero eso vino luego. Las aguas por las que estuvieron interesados nuestros abuelos y tatarabuelos fueron las que les aliviaban del reuma, de la gota, de la artritis, en fin, de casi todo; que para cada dolencia había distintas aguas, cada una con sus propiedades curativas. No olvidemos que los milagros de Lourdes salen de sus aguas.

En cuanto a la formación de esta palabra, del griego nos hemos traído sus dos piezas, pero por separado, que no se les ocurrió a los griegos juntarlas. Udwr (hýdor; en términos compuestos, udro- hýdro) significa agua; y logoV (lógos), razón, ciencia, conocimiento, tratado. El término hidrología se formó pues, con la intención de que significase “conjunto de conocimientos acerca del agua”; pero su analogía con la denominación de otras especialidades médicas, sugiere que se debía interpretar como “conocimiento de las propiedades salutíferas del agua”. A modo de curiosidad indico que la palabra más próxima a hidrología en el diccionario griego es udrologion (hydrológuion). Tiene toda la pinta de ser el padre del horologium romano, que acabaría en nuestro “reloj”). La forma de diminutivo del udrologion (hydrológuion) hace pensar en el eslabón perdido del udrologoV (hidrológos). Llamaban así a una clepsidra diminuta, es decir a un pequeño reloj de agua. Dejo ahí esta observación para desarrollarla en otro momento con calma.

Con estos antecedentes, el Plan Hidrológico Nacional resulta más amable como plan hidrológico, siendo tan sólo el adjetivo nacional el elemento perturbador, la madre del cordero y de sus desgarradores balidos. ¿Por qué no nos fijamos bien en el nombre? Es por ahí por donde conseguiremos desliar la madeja. En efecto, aunque se hagan todos los esfuerzos por que no lo parezca, lo más importante no es lo hidrológico, sino lo nacional. A todos los que discuten sobre el plan se les llena la boca, los pulmones, el corazón y las entrañas de agua. Pero si nos fijamos bien, lo visceral no es la planificación ni lo hidrológico. Lo que mueve tanta molienda no es el agua, no es la longitud y la latitud de sus canales de riego o de trasvase, que con eso cuentan unos y otros; sino la longitud y la latitud de la nación por la que han de discurrir esos canales.

Los que con tanto fervor ecológico se oponen a los trasvases piensan exactísimamente lo mismo que quienes están a favor de los mismos. Lo único que distingue a los unos de los otros es la distancia del trasvase, es decir la extensión del concepto de nacional; se trata de si el derecho sobre el agua del Ebro (por centrarnos en el núcleo del debate) pertenece a la nación aragonesa en un tramo, a la nación cántabra en otro, a la nación riojana en otro, y a la nación catalana en otro, o si pertenece en todos sus tramos a la nación española. Esa es la sustancia. Todos defienden los trasvases, ¡faltaría más!, porque si no se saca el agua de su cauce, no sirve más que para cantar ecologías, que hoy por hoy no son una industria, y por tanto no dan de comer a nadie ni generan riqueza, que es lo que todo el mundo busca, aunque en este momento se calle. Defienden, claro está, su derecho a trasvasar todos los caudales a los que sean capaces de sacarles rendimiento económico, siempre que no se traspasen los límites políticos, que no geográficos, de lo nacional. Y lo que no sean capaces de trasvasar provechosamente para lo nacional, ha de ser el piadoso tributo a lo ecológico.

Mariano Arnal

Expo Zaragoza 2008

Expo Zaragoza 2008 es una Exposición Internacional regulada por el BIE, siglas en francés para Oficina Internacional de Exposiciones (Bureau International des Expositions). Las Exposiciones Internacionales, como la de Zaragoza en el año 2008, se celebran durante 3 meses en una superficie máxima de 25 hectáreas y aborda una temática específica. En este caso, “Agua y Desarrollo Sostenible”.


Río Ebro en estos últimos días después de las lluvias

Diez ideas fuerza de los contenidos de Expo Zaragoza 2008

AGUA Y DESARROLLO SOSTENIBLE. UN CONCEPTO ÚNICO E INDISOLUBLE

Expo Zaragoza 2008 tiene por objeto el agua como elemento imprescindible para la vida; y como objetivo y finalidad el desarrollo humano desde el compromiso ético de la sostenibilidad. El tema se aborda como un desafío inteligente: la innovación para la sostenibilidad. Para la comunicación de los mensajes experimenta con nuevos lenguajes, procurando rigor en la información, claridad en la expresión y fuerza emotiva como soporte y reclamo.

EL GRAN DESAFíO DEL AGUA

Los avances tecnológicos del s. XX crearon el espejismo de poder asegurar el bienestar sobre la Tierra mediante el dominio de las fuerzas de la Naturaleza, pero junto a grandes logros aparecieron graves desequilibrios ecológicos y sociales, entre ellos, la crisis del agua derivada del aumento de la población, el incremento del consumo y el desequilibrio entre la oferta y la demanda del recurso en numerosas partes del mundo. A principios del siglo XXI la humanidad se enfrenta a espinosos problemas de ambientales, entre ellos la crisis del agua. Un reto que afecta a todo el planeta y se caracteriza por el ritmo vertiginoso de los cambios y la complejidad de las interacciones de los sistemas naturales y culturales.

INNOVACIÓN PARA LA SOSTENIBILIDAD

Expo Zaragoza 2008 presentará el valor de la innovación científico-técnica, de los nuevos aprovechamientos y de renovadas fórmulas de gestión y concertación social conducentes a la sostenibilidad de los recursos hídricos. Por ello, en Expo Zaragoza 2008 los participantes destacarán las innovaciones en el conocimiento y tecnología, así como las ideas y experiencias que pongan en valor la calidad en la gestión, la transparencia, la implicación responsable de la sociedad civil y el aumento de autonomía en la toma de decisiones. La innovación para la sostenibilidad no siempre es sinónimo a nuevo, significa también repensar el presente y recuperar usos, prácticas y técnicas tradicionales ejemplares.

AGUA PARA LA VIDA: NUEVO PARADIGMA BIOCÉNTRICO

El agua es el fundamento de la vida y factor decisivo en la distribución y movilidad de las especies y, entre ellas, la especie humana que tiene inteligencia y, en consecuencia, la capacidad y responsabilidad de gestionar el medio natural con criterios de sostenibilidad. La conservación de los sistemas vitales es absolutamente necesaria para la supervivencia y desarrollo de la especie humana. Hombres y mujeres sufren las consecuencias de la mala gestión del medio ambiente. Los participantes en Expo Zaragoza 2008 podrán mostrar sus aportaciones para superar las crisis ambientales (cambio climático, deforestación, degradación de los sistemas hídricos...) así como el patrimonio paisajístico construido por las civilizaciones para el mejor aprovechamiento de los recursos naturales, entre los que el agua es auténtico protagonista.

AGUA RECURSO ÚNICO: EL DESAFIO DE LA GOBERNABILIDAD

El agua juega un papel fundamental para la satisfacción de las necesidades vitales humanas, la salud, la seguridad en la alimentación, el bienestar y las oportunidades de desarrollo sostenible. La crisis mundial del agua se presenta con frecuencia en diferentes foros como un problema exclusivamente de escasez, de falta de oferta de recurso. Sin embargo, es también una crisis en buena medida ligada a la gobernabilidad que exige el desarrollo de planes, estrategias y actuaciones para una gestión sostenible del agua, más inteligente, eficiente, justa y solidaria en sus cuatro dimensiones: social, económica, política y ambiental.

EL AGUA COMO DERECHO HUMANO

“El agua es fundamental para la vida y la salud. El derecho humano al agua es indispensable para una vida saludable y digna. Se trata de un pre-requisito para todos los demás derechos humanos” (Naciones Unidas, 2002). Expo Zaragoza 2008, a través de sus participantes, se suma al reconocimiento del acceso al agua como Derecho Humano universal, presentando los objetivos de las Naciones Unidas y las iniciativas y experiencias encaminadas a que toda la población mundial cuente con agua suficiente, segura, de calidad aceptable, físicamente accesible y económica para uso personal y doméstico. Se tendrá una especial sensibilidad con los temas de la equidad y la igualdad entre géneros y generaciones.

AGUA RECURSO COMPARTIDO: LA CUENCA HIDRODRÁFICA COMO UNIDAD DE GESTIÓN

Las fronteras político-administrativas no suelen coincidir con los límites de las cuencas hidrográficas. Expo Zaragoza 2008 quiere subrayar la conveniencia de considerar la cuenca hidrográfica como unidad de gestión, resaltando los acuerdos, experiencias y buenas prácticas internacionales en la planificación y gestión sostenible del ciclo integral del agua en las cuencas hidrográficas compartidas de diferentes partes del mundo.

AGUA RECURSO COMPARTIDO: LA CORRESPONSABILIDAD DE LOS AGENTES IMPLICADOS

Los desafíos que plantean la crisis del agua a escala local, regional y mundial sólo se pueden resolver con la participación integrada de todos los actores implicados, asumiendo responsabilidades de forma compartida. En Expo Zaragoza 2008 los participantes presentarán experiencias en la gestión compartida de las cuencas internacionales con participación de los gobiernos, gestores y usuarios; experiencias de mediación y resolución de conflictos en el uso de los recursos hídricos de una misma cuenca; innovaciones en la gestión integrada del agua y participación responsable de los diferentes actores: políticos, usuarios y gestores públicos y privados.

AGUA FUENTE DE CREATIVIDAD Y COOPERACIÓN

En el presente, como a lo largo de la historia, los conflictos del agua son una fuente de cooperación y creatividad en todo el mundo. La crisis del agua en el pasado han despertado el ingenio y la creatividad de las sociedades que nos han legado un rico patrimonio cultural. El agua, además de origen de conflictos, es un catalizador para la paz. Los participantes de Expo Zaragoza 2008 podrán plantear los conflictos y desafíos, proyectar escenarios de futuros y difundir acuerdos internacionales y experiencias modélicas de cooperación internacional.

PUNTO DE ENCUENTRO: INTERCAMBIO, COMUNICACIÓN Y FIESTA

Expo Zaragoza 2008 es ante todo un punto de encuentro entre culturas diversas y gentes distintas, que propicia los intercambios de ideas y experiencias de todo orden con una visión positiva para abordar los desafíos que plantea la crisis del agua. Pero ante todo es un encuentro con el público visitante y todos aquellos que recibirán los mensajes de Expo Zaragoza 2008 a través de los medios de comunicación. Expo Zaragoza 2008 quiere difundir los principios con los que construir la nueva relación de los seres humanos con el recurso único e imprescindible para la vida y el desarrollo: el agua. Expo Zaragoza 2008 celebrará los avances e innovaciones para la sostenibilidad con una gran fiesta en la que el disfrute sensorial, la satisfacción intelectual, el ambiente acogedor y la alegría sirvan de vehículo para el encuentro convirtiéndolo en una experiencia inolvidable para el visitante y un legado esperanzador para la comunidad humana

http://www.expozaragoza2008.es

Expo Zaragoza 2008






Publicado en la edición El Almanaque Nº 3123 Sábado 19 de Abril de 2008